Los ayudantes de Antonio Saca hoy ayudan a Nayib Bukele

Francisco Merino, quien fue encargado de protocolo durante el Gobierno de Antonio Saca, se presentó este jueves a la Asamblea Legislativa para coordinar el acto de traspaso de mando de Nayib Bukele. El representante del presidente electo calculó que para el acto tienen un techo de gastos aproximado de 900 mil dólares. También confirmó que la toma de posesión será en la plaza Barrios, del centro de San Salvador. 

Fotos FACTUM/Salvador Meléndez

Luego de 15 días de interrupción, el equipo del presidente electo Nayib Bukele reanudó la comunicación con el gobierno saliente y la Asamblea Legislativa para continuar con los preparativos de la ceremonia de toma de posesión a realizarse el próximo 1 de junio. Para ello, Bukele envió a tres miembros de su equipo de transmisión de mando presidencial, liderados por Francisco Merino Reyes, el hombre que dirigió el protocolo durante el gobierno del expresidente de ARENA, Antonio Saca.

Este jueves, Merino, hijo del diputado Francisco Merino, se mostró como la voz cantante en el equipo de transmisión de Bukele. De hecho, fue el único que habló con la prensa al salir de una reunión realizada a puerta cerrada en la octava planta de la Asamblea Legislativa; mientras, los otros dos miembros del equipo, Alejandro Rivas y Marcela Rodríguez, guardaron silencio.

Francisco Merino (centro), el designado de protocolo del equipo de transición del nuevo gobierno de Nayib Bukele, habla durante  la reunión con el equipo de protocolo de la Asamblea Legislativa, en San Salvador, el 11 de Abril de 2019. Le acompañan Marcela Rodríguez (izquierda) y Alejandro Rivas (derecha). Foto FACTUM/ Salvador Meléndez 

Los únicos nombres que el presidente electo había hecho públicos eran los de Marcela Rodríguez y Sofía Medina. Merino no había figurado en la lista. El encargado de protocolo subrayó ante la prensa la intención de Bukele de celebrar la toma de posesión en la plaza Barrios, del centro de San Salvador. En cuanto a los gastos, según Merino, la orden del presidente electo es “que no se gaste ni un centavo más de lo que se gastó en la toma de posesión anterior”. Aunque no dio cifras exactas, el representante de Bukele estimó en un aproximado de $900 mil el techo de gasto. Sin embargo, para la toma de posesión del año 2014, la Asamblea Legislativa reorientó $1.4 millones de los cuales, según el gobierno de Sánchez Cerén, gastaron 491 mil 163.48 dólares

El entonces presidente de la Asamblea Legislativa, Sigfrido Reyes, coloca la banda presidencial al recién juramentado Presidente de la República de El Salvador, Salvador Sánchez Cerén, durante la Toma de Posesión de su gobierno el 1 de junio de 2014, en el Anfiteatro de la Feria Internacional en San Salvador.
Foto FACTUM/ Salvador Meléndez

Merino participó como candidato a diputado para el Parlamento Centroamericano (Parlacen) bajo la bandera del partido de su padre, el PCN, en las elecciones del 2015, pero no logró ningún escaño. Es un personaje que creció durante la administración Saca, ahora condenando por corrupción, pues de coordinar la agenda presidencial pasó a organizar los eventos oficiales en los que participaba el presidente junto a sus homólogos o miembros del cuerpo diplomático, según su perfil en Linkedin. El expresidente Saca ahora está preso luego de confesar que desvió más de $300 millones de la Presidencia para su beneficio y el de terceros.

Merino no es el único hombre de Saca que ahora trabaja para Bukele. Ernesto Sanabria, un comunicador que trabajó para el expresidente en sus radios, sirvió de enlace para la prensa durante toda la campaña presidencial de Bukele y también fue su asesor durante su administración en la alcaldía de San Salvador.

En el pasado, Sanabria también se ha presentado como el administrador de las comunicaciones de Herbert Saca, primo del expresidente Saca, operador político del mismo y también de su sucesor, el expresidente Mauricio Funes.

Bukele ganó la presidencia el pasado 3 de febrero con la bandera de Gana, partido también vinculado al expresidente Saca, luego de no poder inscribir a tiempo su partido Nuevas Ideas, y tras la cancelación de Cambio Democrático, con el que también intentó competir.