Mucho se habla de las pandillas hoy en día. Mucho se ha escrito sobre sus orígenes y sobre su estado actual, sobre cómo el inmenso fallo del Estado salvadoreño para atender el fenómeno con políticas inteligentes, cuando no era el principal asunto de seguridad pública, desembocó en la crisis actual.

Quisimos, en esta edición, acompañar el lúcido análisis del académico salvadoreño José Miguel Cruz sobre la crisis del triángulo norte de Centroamérica, que incluye una extensa reflexión sobre el lugar de las pandillas en esa crisis, con una galería fotográfica de Francisco Campos, que retrata el génesis de estos grupos juveniles.

Escribe Chico Campos:

“Los primeros pandilleros fueron, sin duda, jóvenes descontentos que buscaron en estos grupos el apoyo que no encontraron en sus familias. En aquellos años era fácil ir a tomar fotos a lugares como Apopa,  al norte de San Salvador, o a La Comunidad Iberia, al  oriente del Centro Historico de la capital…

La actividad de los pandilleros, en 1994-95, se limitaba a reuniones para consumir marihuana, crak y hasta pega; salidas para manchar sus barrios y pedir dinero a los vecinos de sus colonias sin que aún se hubiese establecido el cobro de la llamada ‘renta’…

Estas imágenes son de la colonia Los Naranjos en Apopa, la Iberia en San Salvador y la llamada Calle de la Amargura en el centro”.

Pies de foto (de izquierda a derecha)

1. Agentes de la PNC registran a un pandillero en la colonia Los Naranjos de Apopa.

2. Un pandillero posa junto a una pinta de la Virgen de Guadalupe en Quezaltepeque, al norte de San Salvador.

3. El Grillo (derecha) ofrece un “súper” a otro joven pandillero mientras fuman marihuana en Los Naranjos en Apopa.

4. Pandilleros de la Colonia los Naranjos de Apopa preparan un cigarro de marihuana.

5. Un joven vestido de romano camina frente a los grafitis de las pandillas en la Calle de la Amargura en el Centro Histórico de San Salvador.

6. El “Chucky”, uno de los jefes pandilleros de la Comunidad Iberia en 1995.

7. (Imagen destacada) Pandilleros hacen sus señales en la comunidad Iberia de San Salvador.

 

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