La noche del pasado 2 de junio, más de siete mil personas se contagiaron de la llama que prendió el grupo de reggae caribeño Cultura Profética. El anfiteatro del Centro Internacional de Ferias y Convenciones (Cifco) atestiguó el vibrante show que ofrecieron los boricuas. Muchos lo recuerdan ya como uno de las mejores conciertos del 2017.

Fotos y videos de FACTUM/Gerson Nájera


Con una racha de conciertos de artistas internacionales cancelados en los últimos meses, el público salvadoreño —y uno que otro extranjero— esperó casi tres meses para romper con la cotidianidad de un viernes por la noche. Esperó desde que arrancó la preventa de boletos, el 9 de marzo pasado, para por fin acudir a la presentación de Cultura Profética en San Salvador.  

Por ejemplo, está el caso de Angela Guerra y Daniel Santos, ambos de origen hondureño. Desde que se difundió la noticia de que los puertorriqueños visitarían el país, la pareja aprovechó la primera preventa, cuando los boletos de la zona “dancefloor se vendieron en $25.

A su llegada a El Salvador, Factum los entrevistó para que nos compartieran su experiencia:

“Es primera vez que voy a ver a Cultura Profética en mi vida. Tenemos años de esperar a la banda en Honduras. Nos dimos cuenta de que venían a El Salvador y, cuando compramos los boletos, anunciaron que (también) estarían, dos días después, en nuestro país

– Daniel Santos.

Pese a que ya tenían las entradas para el show en San Salvador, ambos también aseguraron sus entradas para ver a Cultura Profética en Tegucigalpa. Ellos compartieron la idea de que no es de todos los días que van a ver a su banda favorita dos veces en una misma semana.  

Y así fue. El 2 de junio abordaron el primer bus que viaja desde Honduras (por más de nueve horas) hasta llegar a la colonia San Benito, en San Salvador, a escasos 700 metros del recinto que congregó a una legión de fans que vibraron en el anfiteatro del Cifco, cuando cantaron todo el repertorio de Cultura Profética durante casi dos horas. 

Pese a que la convocatoria del concierto fue a las 8:00 de la noche, los asistentes pasaron por tres filtros de seguridad que, en promedio, les costó una espera en fila de unos 40 minutos. Por ello, no todos pudieron estar para la presentación de los santanecos Rasfortis & Greenmoons, acompañados de los vientos de Vibrass Ska Ensamble. 

Sobre las 9:15 de la noche, empezaron los nacionales a calentar el ambiente de quienes estaban en en el “dancefloor y en “general”, pero el anfiteatro aún estaba a un 50% de su capacidad. Al filo de las 11:00 p.m., ya era imposible movilizarse y encontrar un espacio que estuviera libre de personas.  

Las voces, los gritos cargados de euforia y la densidad del aire que relajaba los sentidos anunciaban el momento esperado por todos. Las luces se apagaron y en la pantalla detrás del escenario se proyectaron fotografías de Cultura Profética, con una voz que al ritmo de los puertorriqueños mencionaban los países visitados en su gira. En ese soundtrack se mencionó a San Salvador y todo lo demás es una historia que hay que volver a repetir en nuestro video resumen del concierto y nuestra galería fotográfica.


[Angy y Santos forman una pareja de hondureños que al enterarse de que Cultura Profética daría un concierto en San Salvador, decidió comprar los boletos en línea y verlos por primera vez en el vecino país. Al mes de haber comprado sus entradas, los puertorriqueños anunciaron que también ofrecerían un concierto en Tegucigalpa, dos días después de estar en San Salvador. Entonces Angy y Santos decidieron disfrutar de ambos conciertos.]


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